EL IBÓN DE PLAN O BALSA DE LA MORA

UN DÍA EN EL IBÓN DE PLAN ( HUESCA)


Situado en el Valle de Gistain, en pleno Piríneo oscense es un lugar privilegiado que se halla en lo alto del mismo, un lago que vale la pena visitar cuándo se recorre este precioso sitio, también es conocido como la Balsa de la Mora. He tenido la suerte de visitarlo dos veces en las tantas ocasiones que estado alojada en Plan ( Huesca), famoso por la Caravana de Mujeres. Pero os puedo asegurar que vale la pena ir a todos los amantes de la naturaleza y el senderismo, seguro que os encantará. Se puede acceder a él por dos lugares: uno desde Plan, dejando la carretera principal a la entrada del mismo, detrás de la piscina y el polideportivo, hay un camino empinado que sigue el rumbo hacía ese destino, una buena caminata pero seguro que la recompensa vale la pena.
El otro acceso es el pueblo de Saravillo, que se encuentra a la entrada del Valle, se puede subir en coche, siempre mejor un 4x4, que se aparca en una pista y desde allí el acceso hay que hacerlo andando. La verdad que si tienes un buen guía, es mucho mejor ya que te va explicando las preciosas vistas que tienes a tus ojos. El Valle de Gistaín con los tres pueblos: Plan, San Juan de Plan y Gistaín, que toma el nombre del mismo, en lo alto. Cómo también el pueblo de Sin que se deja a la izquierda cuándo te vas adentrando por la sinuosa carretera que llega a los pueblos anteriormente mencionados.
Vas viendo la vegetación que tienes y las montañas imponentes que rodean ese lago que corona la misma, allí la mayoría de los visitantes se bañan, comen y así hacen un alto en lacaminata y reponen fuerzas. Un lugar de relax y tranquilidad que se respira allí. Además la compañía de la que vas es mucho más amena ya que se puede comentar lo que cada uno siente en ese momento y lugar. Hacerse fotos para poder recordar la visita y enseñársela a los amigos y familiares para poder demostrar ese lugar tan especial que vale la pena visitar.

UN FLECHAZO SIN ESPERARLO

 

Le gustaba aprovechar los días de fiesta, y algo que le encantaba era pasear e incluso tomar un café mientras leía o el periódico o algún libro que tanto le apasiona. Esa vez se había ido por otro lugar que hacía mucho tiempo que no iba, no sabía porque había cambiado su itinerario, pero le gustaba ir por el parque grande de su ciudad. Tenía algo que siempre le atrapaba, aunque no estaba lejos de su casa.
Estaba enfrascada con la lectura que no se daba cuénta que alguién le pregunto :" perdona me puedo sentar contigo", era un chico que no conocía pero que llevaba rato mirándola sin que ella se fijará que era vigilada por un joven muy agradable. Ella al principio pensaba que no era a ella a quién la llamaba. Pero sin embargo, era todo lo contrario, él no dejaba de sonreirla y se sentó en su mesa. Ella dejó el libro en su bolso.
Se presentaron con unos besos en las mejillas, empezaron hablar de cosas típicas para poder romper el hielo en un momento como este. Se dieron cuenta que según lo que iban diciendo de sus vidas, se parecían mucho, y tenían bastantes cosas en común. Vamos que el rato iba a ser muy ameno. Él en lugar de ponerse enfrente se puso a su lado, quería estar más cerca de ella, lo necesitaba y a poco le cogió su mano para tener la oportunidad de que en un descuido darle un beso en la boca, aunque fuera corto y tímido.
Así fue, ella al principio un poco reaccia a la situación que se había presentado, pero sin embargo se dió cuenta que ese chico le atraía bastante, no tenía pareja y casi eran de edad parecida no le importó responder a ese beso tímido.....quizás pronto habrá otros más largos y especiales. La verdad que no tardaron en llegar cuándo ya se iban a marchar de aquél sitio decidieron dar otro paseo por ese parque que a ella tanto le gustaba. Él no era de esa ciudad y le encantó tanto ese parque que lo autodenominó " El parque del amor".
Buscaron un lugar más resguardado y allí siguieron hablando muy juntos, con las manos entrelazadas y continuaron con los besos apasionados y largos, hacía tiempo que no encontraba a alguién que le hubiera atraído tanto en el momento de conocerse, como si hubiera sido un flechazo en toda regla. Cómo no le esperaba nadie en casa ni a él decidieron ir a comer juntos y seguir con ese momento tan especial que se había dado entre ellos. Ya verían si eso era pasajero o duraría mucho más....el tiempo lo diría.

UNA BODA EN PLAN


Estábamos mis amigas y yo pasando una semana de vacaciones en este precioso lugar que es Plan, en Huesca, en pleno Valle de Gistaín. Localidad que guardo con mucho recuerdo mis tantas ocasiones que he estado allí, además de disfrutar del bello paisaje que tiene por sus alrededores. Bueno era sábado, sabíamos que había una boda de un familiar de gente de allí que siempre han vivido este lugar.
Nos dedicamos en esa semana a ir conociendo los lugares que están cerca, pero ese día pensamos visitar la Iglesia de Plan y luego ir al pueblo de al lado, San Juan de Plan, ya que nos quedaba por visitar el Taller textil artesano y darnos una vuelta por el pueblo, recorriendo sus calles. Al salir de la casa dónde estábamos alojadas nos encontramos de lleno con la salida de la novia de casa de sus padres, y después de visitar todo lo que teníamos pendiente en San Juan, cuando volvímos a Plan nos volvimos a encontrar a los novios que ya eran marido y mujer.
Es cierto que el pueblo es muy pequeño y vayas por dónde vayas siempre te encuentras a alguién conocido con quién puedes hablar un momento. Bueno no le dimos la circunstan cia más importancia, ya que continúamos con nuestra marcha y después de cenar en casa y tomar un café en el bar por salir un rato por la noche, hacía calor y no apetecía estar en casa. Nos dijeron en el bar unos amigos que en el Ayuntamiento, en los bajos hacían una fiesta los novios y sus familares para todos los que quisieran ir, a nosotras no nos apetecía mucho, si acaso un rato.
Así que al final como estábamos con amigos lugareños fuimos y nos quedamos hasta el final del baile. Ya era de madrugada y nos íbamos a casa cuándo los hermanos de la novia nos dijeron que era costumbre ir a despertar a los novios en el hotel dónde estában; a nosotras la verdad que pensábamos que no pintábamos nada allí así que pusimos la escusa que era muy tarde y que nos íbamos a dormir ya, pero nada de eso ocurrió, ya que con el guardaespaldas que teníamos no pudimos negarnos y allí fuimos a despertar a los novios, eso si que no entramos en la habitación, si no que nos quedamos en el pasillo.
Después de ello nos fuimos a casa a dormir unas horas, no muchas ya que teníamos que madrugar algo y luego por la tarde ya volvíamos a casa, a Zaragoza. Pero la verdad que fueron unas vacaciones muy divertidas y entrenidas, vimos muchos lugares que no conocíamos y nos encantaron. Además de seguir relacionando con los lugareños y buenos amigos que tenemos allí desde hace muchos años. Es una zona del Pirineo que vale la pena conocer y visitar a todos los que nos guste la montaña.

HASTA PRONTO JAVI

Marina: ¡Silencio!. ¿Qué es lo que se oye?.
Es el latido de un corazón que desde Asturias NO dice adiós.
Por encima de las ondas susurra que se queda aquí con nosotros. Queriéndonos, haciéndonos reír siendo como es.
No hay distancia para un noble corazón, y menos si es de Gijón.
 
Celia: la distancia no es el olvido y cuando hay un cariño tan grande menos todavía.
Rosa: Tienes apariencia de hombre duro, roído y castigado por la vida. Pero tus ojos destilan cariño: cuándo estas con tu esposa, cuándo miras a tu hijo, cuándo ríes con los amigos...
Eres generoso en bondad. Lo sé. Revolucionario y justo, como
buen asturiano. Allá a dónde vayas harás amigos, porque eres un tío cojonudo.
Y no te olvides de enviarme cada día una rosa. Me has malacostumbrado, buen amigo mío!!!!
 
Inés: A veces se conocen a un buen amigo de forma muy diversa, pero sabes que será alguien tan especial que será difícil olvidarle aunque esté lejos
Antonio: Erase una vez un amigo Asturiano que siempre tenía bonitas palabras para sus ami@s, no lo olvidaremos nunca ni a él ni a su tanga de leopardo....
VALENTÍN: Has decidido cambiar de aires, una nueva etapa vas a comenzar y los que te queremos por ser cómo eres, te deseamos lo mejor. No creas que un charquito va a conseguir que nos olvidemos de lo grande que eres. Siempre nos quedarán unas gotas, unos cafés, unos amigos…
ANTONIO: Erase una vez un amigo Asturiano que siempre tenía bonitas palabras para sus ami@s, no le olvidaremos nunca ni a él ni a su tanga de leopardo....
YOLANDA: Impresionados por la pureza de sus sentimientos y atrapados por su simpatía, no le dejaremos marchar. Llévanos en la maleta Javier, seguiremos contigo donde quiera que estés.
ENRIQUE: Se borran las fronteras y las distancias no lo son tanto cuando uno se da cuenta que el sol es el mismo para todos y para todos es la misma la luna y el corazón en realidad no vive en el pecho...sino comienza en uno mismo y se extiende hasta donde se extiende nuestra mirada, nuestro recuerdo, nuestro cariño y nuestros sueños venideros.
BUEN VIAJE
NO NOS HAGAS ESPERAR

UN HOTEL CON ENCANTO


Por motivos de trabajo tenía que salir dos días fuera de su ciudad a un hotel pequeño, familiar pero que tenía su encanto, en un lugar de montaña. Aunque ella era la única que iba de su empresa allí se encontraría con otras personas de otras ciudades en las que había oficinas. Iba un poco prevenida por lo que pudiera suceder, seguro que esos días serían especiales por todo. Le gustaba el tipo de trabajo que hacía, y este viaje suponía un posible aumento de sueldo y quizás un ascenso.
Se había preparado bien para esa ocasión que seguro que le iba a cambiar la vida, algo rutinaria que ya tenía ganas de que algo cambiara. Sacó los billetes y estancia con tiempo, no quería dejar nada de última hora, le gustaba ser previsora por si acaso algo fallará en el momento menos oportuno. El viaje de ida lo hizo en autobús era el único medio que había hasta ese lugar. Aunque iba lleno a ella le tocó un asiento libre a su lado, no le importó ya que iría entretenida en el trayecto, su música que escuchaba con el móvil, sus redes sociales de vez en cuándo y su libro que le había enganchado, pero que llevaba tiempo si leer, casi había perdido el hilo. Pensó que así lo acabaría ya.
Cuándo llegó al lugar se enamoró del mismo, un hotel pequeño pero con mucho gusto en la decoración y que hacía que te sintierás a gusto en ese sitio. La gente que allí trabajaba también era muy atenta con todos aquellos que se alojaban para hacer ese encuentro de trabajadores de esa empresa tan importante. Otras veces habían coincidido en otras ciudades también bonitas, pero no se que le pasó a ella que al entrar allí notó que su corazón le insinuaba que algo importante podría pasar.
Fueron llegando los otros compañeros y se saludaron, aún había varias horas hasta que se empezará las reuniones del equipo de trabajo, y cuándo ya sabían cuales serían sus habitaciones ella bajó al bar a tomar algo, que le apetecía hacer tiempo. Se sentó en una mesa al lado de la ventana para poder contemplar ese paisaje con la montaña no muy lejos de allí que siempre le había encantado, más incluso que la playa. Parece que estaba pensativa cuándo apareció un chico y le preguntó si se podía sentar con ella.
A ella al principio se quedó sin reaccionar, no se esperaba que fuera a ligar con nadie, pero ese chico algo hizo, su bonita voz y su sonrisa encantadora, que le ofreció la silla que estaba enfrente de ella. Empezaron hablar de cosas rutinarias,sus nombres, trabajos , de dónde eran, bueno lo típico de un momento de conversación para ir rompiendo el hielo; poco a poco vieron que tenían muchas cosas en común y que estaban muy a gusto juntos. Pensaron en comer juntos después de la reunión de trabajo. Y cómo tenían horas de descanso ya verían lo que hacían juntos, pasear o lo que surgiera.

UN CONCIERTO DE MÚSICA CANARIA EN VIVO


Hace años en las vacaciones que hice con mis amigas en el verano a Tenerife, más concretamente al Puerto de la Cruz, que fue el lugar dónde nos alojábamos, en un hotel situado en pleno centro de la ciudad, que resultó que era el más antiguo de esa bonita localidad. En nuestro hotel como en la mayoría de ellos para los turistas había actuación musical variada.
De los días que estuvimos allí, una semana seguimos el concierto en la terraza del hotel a una pareja de chicos jóvenes canarios, que la verdad que cantaban muy bien. El primer día ya se quedaron con nosotras porque nos dedicaban algunas canciones, y en el segundo ya hablaron con nosotras, uno de ellos que era más simpático, el otro era más serio. Bueno ya el último día que actuában en el hotel, se acercó al lugar de la terraza que estábamos con una pareja de nuestra ciudad que eran amigos de una de nosotros y nos preguntó si nos gustaba escuchar un concierto de música viva en un local no muy lejos de allí.
Pusimos escusa que teníamos que madrugar para visitar otra ciudad,tocaba La Laguna y Santa Cruz de Tenerife, y la Playa de las Teresitas, pero nos dijo " estaís de vacaciones, venid un rato". Bueno lo pensamos un poco y decidimos ir tres de nosotras; lo malo que nos costó un poco entontrar el lugar, un bar pequeño pero muy acogedor. Así que bajamos las escaleras y nos colocamos cerca de ellas en una mesa que quedaba libre. Vimos la gente que alli estaba, algunos de ellos los conocíamos de la terraza del hotel.
Nosotras que llevábamos la noche de risas, ya que por cualquier cosa no podíamos evitarlo lo pasamos genial con la actuación. El dueño del bar, que también era canario y joven se quedó con nosotras de la marcha que llevábamos las tres, quería saber más de nosotras. Se notaba que el músico que nos invitó al concierto y él eran amigos. El primero cuándo hizo el descanso se acercó a nosotras y estuvo hablando un rato, contándonos un poco su vida, muy simpático era. El otro un poco celoso quiso que volvieramos otro día, nosotras dijimos ya veremos, no estaremos mucho en la ciudad, y queremos conocer parte de esta Isla en estos días.
Lo malo era que sabía dónde nos alojábamos, ya que pasó varios días por allí y se fijó estábamos por la calle, o cerca del hotel. Otra noche otra de las amigas nos quisimos dar un paseo antes de dormir, llegamos cerca de su bar y allí estaba dándo folletos del mismo, nos dijo como se llamaba y nos quería invitar el último día de despedida a tomar algo, y le dijimos ya veremos si podemos pasar. No entramos, pero al despedirse nos díó dos besos a mi amiga y a mi. Fueron unas vacaciones muy divertidas, y en parte a que vimos lugares preciosos y la gente es muy amable. Os recomiendo que la visitéis.

UNA TARDE EN EL PARQUE DE ATRACCIONES


A mi amiga Olga y a mi siempre nos han gustado desde pequeñas las ferías de atracciones, ya que en Calatayud cuándo vivíamos allí teníamos la suerte de que las ponían al lado de nuestra casa, y casi siempre estábamos allí con nuestras amigas. Nos montábamos en casi todos los sitios: noria, tren de la bruja o Chu-Chu, Selva etc, lo que menos los autos de choque. Así fué cuándo un verano estaba pasando unos días en mi casa, en Zaragoza, decidimos irnos las dos al Parque de Atracciones que hay en la ciudad.
Cogimos el autobús ya que pilla un poco lejos de casa. Al llegar ahí no sabíamos en que montar primero,nos sacamos la famosa pulsera para montarnos en todo, ya que había tantas atracciones que nos gustaban que no sabíamos elegir por dónde empezar. Pensamos ir primero a las barcas que iban por el agua, con el consiguiente atasco que hicimos, no sabíamos llevarla bien; además detrás, en otra barca había dos chicos que hablaron con nosotras y nos decían cómo debíamos conducirla para ir bien. Lo de menos era eso, si no que lo importante era pasarlo bien.
Bueno en la noria, y demás nos encantaba montarnos; lo que no podíamos era con el Barco Missippi, entrábamos y al momento salíamos, nos daba algo de miedo, así varias veces, hasta que al final conseguimos hacerlo completo; nos reímos porque no era para tanto, aunque había una sala que parece que estaba recta, con una mesa en medio, que al andar se inclinaba y te impedía llegar a la salida. Teníamos un amigo que vivía aquí en Zaragoza y lo llamamos y vino a vernos.Con lo que no parábamos de reirnos fué con la sala de los espejos que se te veía de muchas formas diferentes: gordos, delgados , en fin de tantas maneras que no salíamos de allí.
Se alegró de vernos y con él lo pasamos estupendamente en los demás aparatos que había; a él lo habíamos conocido en Calatayud ya que en el verano trabajaba en las ferias con alguna atracción y así nos hicimos amigos. Si sácabamos más boletos siempre nos regalaba algunos más o nos dejaba montar en el balance que era como columpio en grande que se movía y nos encantaba montarnos en él; nunca nos maréabamos con las veces que lo hacíamos. Ahora sin embargo, hace muchos años que ya no voy por las ferias en las fiestas del Pilar, ya no me gustan tanto, pero tengo el bonito recuerdo de lo bien que lo pasaba con mi amiga Olga.

UN PARAGUAS INESPERADO


Salió con prisas de casa no se dió cuenta que el cielo se había encapotado y que seguramente iba a llover, pero se había cambiado de bolso y el paragüas pegable se lo había dejado en el otro. Pensó que no iba a tardar tanto en volver a casa aunque la verdad que nadie la esperaba, pero allí también era su paraiso y se encontraba en la gloría con su música, sus libros y algo de ordenador. La tele apenas la vía pero así era feliz con su vida, sus amistades que veía cada sábado.
Cómo casi siempre hacía el mismo camino ya fuera para ir al trabajo, o al centro, ya parecía que sus pies ya sabían la ruta que tenía que seguir. Bueno iba algo rápida, siempre con su música en los cascos que escuchaba del móvil, así el camino no se le hacía largo ni aburrido y sin darse cuenta que alguién le seguía casi al mismo ritmo que iba ella. Él pensaba dónde irá n tanta prisa, otras veces no iba así. Parecía que llegaba tarde al lugar dónde tenía que ir.
Lo malo fué que el día se iba a estropear pensó ella, empezó a gotear, al principio muy débil, pero aceleró para por lo menos resguardarse en algún bar conocido a tomar un café y así mientras escampaba algo, pero ocurrió todo lo contrario, que empezó a llover con ganas que no iba a parar por lo menos en poco tiempo. Se dijo, siempre me pasa igual, odio el paragüas, pero es necesario en estas ocasiones. No escuchaba que alguién la llamaba, al llevar los cascos aunque no estaba muy alta, oía voces, pero pensó que sería a otra persona que pasará por allí.
Sin embargo esa calle estaba desierta, solamente ella y aquella persona que le llamaba y no se enteraba, al final le sujetó, y ella se asustó en un principio, pensando vaya cara la persona que me agarra, pero al darse la vuelta pudo comprobar que era un amigo suyo que hacía mucho tiempo que no veía. Al principio casi no le reconoció, pero la sonrisa de él le delataba ya que casi sin aire por fin la pudo alcanzar.
Llevaba paragüas y al momento se lo puso para que ella dejará de mojarse, y a continuación de los saludos pertinentes se ofreció a ir con ella al lugar que iba con tanta urgencia. Pero antes entraron a tomar un café y hablar de sus vidas que en esos años que no se veían, algo habían cambiado. Y comprendieron que esa amistad permanecía en el tiempo aunque pensarán que la distancia la había borrado o desaparecido. Pasaron un momento muy especial para ellos. Tanto que casi olvidó a que había salido, ya lo haría en otro momento seguro.

EL MONASTERIO DE PIEDRA


Es una suerte que esta belleza de lugar esté en mi tierra, Aragón y más concretamente en la provincia de Zaragoza, en la Comarca de Calatayud, al lado de Nuévalos. Una zona llena de belleza natural, con un Parque Natural que destaca sus inmumerables cascadas dónde el agua recorre todas sus piedras y saltos naturales, lagos de agua cristalina que hace al que lo visita que le relaje y quiera disfrutar de ese momento.
Hay que ir bien preparado para pasearlo bien, siguiendo sus flechas rojas y azules y con ello se ve completo. Numerosas cuevas o grutas y caminos que provocan la sensación de que se ha parado el tiempo por un momento. Con buen calzado y con ganas de caminar un buen rato te hace relajarte, el escuchar el sonido del agua que descienden por las piedras en las cascadas o el murmullo de otros visitantes que como tú tienen la misma sensación. Destaca la famosa Cascada de la Cola de Caballo, la más alta y encima la tienes que pasar por debajo para continuar con la visita.
Es bonita la sensación del agua mojándote, no mucho pero es agradable, además de las preciosas vistas que provoca la luz que le da el sol, a diferentes horas del dia y en las numerosas estaciones que esa luz es distinta. Cuándo ya lo has paseado es conveniente acudir y visitar el Monasterio en la parte religiosa, dónde vivían los monjes, además de que hay un hotel precioso y restaurantes. Lugar de bodas por el enclava tan precioso que luego se inmortalizan en las fotos del álbum.
Lo he visitado en numerosas ocasiones, con familiares y amigos, un lugar de excursión que a todos gustaba y se disfrutaba de los alrededores, como por ejemplo era el Pantano de la Tranquera en Nuévalos; dónde allí es el momento del descansar de la caminata comiendo a la brasa, o como se quiera y comentar lo que nos ha parecido a cada uno este lugar tan especial que es el Monasterio de Piedra, ya que a quién que lo visita tiene que volver alguna vez más. No os dejará indiferente os lo aseguro.

LA RIADA EN CALATAYUD

Siempre pensamos y la mayoría de las veces por desgracia así es, las ríadas que se producen las consecuencias son trágicas, con pérdidas económicas y peor si son de vidas humanas. Me acuerdo hace muchos años que en los años que vivía en Calatayud, años 70, nos anunciaban en la ciudad la venida de una de ellas, que por lo visto era muy peligrosa. Estábamos en puente, ya que se celebraba Jueves de Corpus o de la Ascensión, no me acuerdo bien, pero nos dieron fiesta en el Colegio por la tarde.
Nosotros vivíamos en un primero que hacía tercero ya que había entresuelo y principal, en un edificio de cuatro pisos, y el vecino que vivía un piso antes que nosotros, era de Soria, nos decía yo en cuanto vea una gota de agua en el portal me voy a Soria. Esta conversación nos hacía que nos preocupáramos, eramos muy pequeños. Mis padres claro también están pendientes de lo que podía ocurrir con esa ríada que llegaba a Calatayud y no se sabía sus consecuencias.
La verdad que en el edificio que vivíamos había buena relación entre los vecinos y otro de ellos, que eran amigos nuestros nos dijo, si ocurre eso yo os llevaré a otro lugar para que esteis más tranquilos vosotros y los niños. Así fué que antes la insistencia nos llevó por la noche, casi con lo puesto y algo más de ropa a Cervera de la Cañada, a una casa que tenía habitaciones.
Allí no estábamos mál pero nosotros insistimos a nuestros padre que nos fuéramos a Illueca, nuestro pueblo natal y así fué lo que pasó, que llegamos de madrugada y asustamos un poco al principio a los familiares por llegar a esas horas tan impestivas. Nos alojamos alli mucho más tranquilos y encima como había puente, disfrutamos de cuatro días de fiesta y lo pasamos en grandes con tíos y primos.
Cuándo luego el domingo llegamos a nuestra casa, vivimos que afortunadamente no había sido tanto la ríada, la gente estaba preparada sobre todo, en edificios que tocaba cerca de la calle, es decir, plantas bajas, pero no nos arrepentimos de nuestro viaje. El por si acaso pasa algo peor.

UNA TARDE EN EL CAMPO CON LOS AMIGOS

Me acuerdo que cuándo vivía en Calatayud todos los años ibamos los amigos y yo al campo un día muy especial, la tarde de jueves lardero. En el Colegio nos daban fiesta por la tarde para celebrar ese día tan especial. La merienda de longaniza y algo más según nos apeteciera. Cada año cambiábamos el lugar, siempre cerca de la ciudad, unas veces al Castillo de Ayud, otras algunos pinares de San Antonio e incluso otras veces a otros pinares que estaban a la entrada de la ciudad viniendo desde Zaragoza.
Lo de menos era el lugar, aunque eran especiales para nosotros, ya que estábamos un rato juntos y el poder celebrar la amistad que nos unía desde hace mucho tiempo era muy importante para todos. Empezábamos con una buena caminata para llegar al lugar elegido, después la merienda y algún juego y después vuelta para casa, contentos y algo cansandos, ya que habíamos tenido clase por la mañana y luego no nos podíamos acostar muy tarde ya que teníamos clase al día siguiente.
Seguro que se nos haría un poco duro el viernes, ya terminaba la semana y el fin de semana se podía descansar, pero lo que más nos preocupaba era una de las clases que teníamos ese viernes por la mañana, la clase de gymnasia y además daba la casualidad que la proferora era muy dura y exigente. Entonces vió que no nos apetecía mucho dar clase ese día, se imaginó que la excusa nuestra era la excursión la tarde anterior al campo para celebrar el jueves lardero, pero eso no significaba que nos exentaba de la clase si no todo lo contrario.
Se mosqueó y nos hizo dar numerosas vueltas corriendo y andando al patio dónde dabamos las clases, algunas de nosotras nos decíamos te saco la zapatilla y así descansas un rato, pero ella que estaba al acecho de lo que pensábamos nos lo impidió y tuvimos que dar las vueltas que dijo ella, para nosotras una barbaridad, pero ella era la que llevaba la voz y el mando y no nos quedó otra que hacerlo no fuera que nos suspendiera la asignatura y eso no nos apetecía a nadie. Tenía fama de profesora dura, era curioso que su marido daba clases de lo mismo en el Instituto y no era tan duro como ella.
Recuerdos que tenemos de nuestra època estudiantil que a pesar del paso de los años no se olvidan y se mantienen en nuestra memoria y sale a flote alguna vez que no te lo esperas que te acuerdes de ese momento como si fuera ahora.

LOS AMANTES DE TERUEL


Estamos en el mes de febrero y el 14 del mismo se celebra San Valentín, el patrón de los enamorados. En la ciudad de Teruel llevan años organizando para las fechas cercanas la representación de " Las Bodas de Isabel de Segura", con un éxito de público, acompañado del mercadillo medieval. Esta bonita localidad se transforma en la época en que ocurrió la leyenda de Isabel de Segura y Diego de Marcilla, los famosos Amantes de Teruel, y hace que propios y visitantes que acuden a verla se impregnen de ese momento y lo vivan con intensidad.
Durante cuatro días que dura la representación la gente participa totalmente, disfrutan de las fiestas de la Boda, se emocionan con las noticias que ocurren con la supuesta aparición de Diego de la guerra, se entristecen con la muerte de Diego y posterior muerte de Isabel. La verdad que es una suerte poder estar allí viéndola, he estado dos veces y me encantó. Teruel es una ciudad pequeña, pero acogedora, con monumentos muy destacados que hay que visitar: La Catedral, con su preciosa techumbre de madera, Las Torres de San Martín, San Pedro, con su Iglesia restaurada, lugar dónde están los Maúseleos de los Amantes y la de San Salvador.
La Plaza de Torico y al recorrer los numerosos enclaves dónde tiene lugar la representación de la obra, ya sea en edificios o en la misma calle, emociona ver a la gente que participa activamente de la historía, haciendo que sean uno más de ellos. Si no es posible verlo en directo en la televisión de Aragón TV lo retransmiten en directo, y desde casa se puede ir de un lugar a otro y ver la autencidad de los actores que son amateurs pero lo bordan. Este año es especial, ya que celebran el 800 años de la leyenda, con lo que supone una inmuerable cantidad de actos y actividades en Teruel, con los turistas llegados de todas los lugares a conocer la ciudad y poder participar de su historia más famosa.
El año pasado en la representación también fue especial, ya que participaron los actores y actrices que hicieron de Diego e Isabel, y en el cortejo fúnebre tanto de Diego en un primer momento como con el de Isabel junto a su amado llenó de emoción contenida a todos aquellos que lo veían in situ como por televisión. Era el 25 aniversario y por lo tanto lo tenían que hacer especial, como así fué. A veces el tiempo no acompaña, febrero suele hacer frío, pero mientras que no llueva, ya que desluce la representación llendo bien abrigados no notas el frío tanto.
Espero que se representen muchos años, y que todos aquellos que la visiten en la época que sea vuelva a visitarla. Te encontrarás en una ciudad muy acogedora y bonita, dónde el múdejar resalta por casi todas sus obras monumentales, y recorrerlas sus calles y plazas y relacionarse con sus gentes. Teruel es conocida gracias a sus Amantes, Diego e Isabel como la ciudad del Amor, que no sólo tiene que ser en esta època si no siempre.

PILI CON ONYX Y COPITO

INÉS CON ONYX Y COPITO

EN EL PARQUE CON ONYX Y COPITO


Mi prima Pili tiene una bonita perra llamada Onix y yo tengo un perrito pequeño, un bichón maltés llamado Copito, que es de mi hermana Conchita y sobrina Laura, que de vez en cuándo me lo dejan unos días para cuidarlo. A mi me encanta tenerlo, lo malo que si me toca trabajar y si estoy sola en casa, como fueron esos días, el pobrecillo está todo el día sólo. Al tener fiesta ese fin de semana, pensamos las dos primas quedar una mañana con los dos y que ellos se conocieran y nosotras estar juntas un rato y poder hablar.
Decidimos quedar el sábado pronto, a las diez de la mañana en el Parque Buil, nos iba bien a las dos, más o menos a mitad de camino. Salí antes a darle la vuelta y esperé un rato porque aún era pronto para ir hacía el lugar de encuentro, pero se puso nervioso y así que salímos antes de tiempo y fuímos andando. La verdad que nunca había ido por ese camino, coincide con el de mi trabajo, ya que ese parque está cerca de la Residencia. Copito la verdad que casi me llevaba por mi camino diario al trabajo sin haber ido nunca juntos por ese lugar.
Disfrutó recorriendo las calles anchas y sin casi gente, me tomé un café por hacer tiempo e incluso entré un momento a la Residencia, mis compañeras y los abuelos lo querían conocer, así que entramos un momento, siempre en brazos, cosa que él no quería pero no me fíaba mucho de él. Bueno luego nos fuímos a la entrada del parque, ya era casi la hora y no tardaron en llegar mi prima Pili y Onix, una perra negra preciosa y cariñosa.
Los dos se lo pasaron en grande, corrieron, jugaron entre ellos y nosotras disfrutamos también de estar juntas y de que ellos lo pasaran estupendamente. De aquél paseo por el Parque Buil y luego también por la Ribera del Ebro, e incluso cruzamos el Puente de las Fuentes y nos dimos una vuelta por la otra orilla, la margen izquierda como se le conoce. Hacía aire pero no se estaba nada mal, ya que hacía sol y apetecía pasear, lo que claro a la marcha de los ellos que eran los que ponían el ritmo del paseo.
Cuándo llegó la hora de la despedida nos fuimos andando hacía casa, otra vez un largo paseo que añadido al de ida y lo que habíamos estado por allí fueron casi cuatro horas. Nos costó un poco llegar a casa, pero la satisfacción de haber pasado una mañana estupenda valío la pena. Lo repetimos otro día, pero esta vez aún fue más largo el paseo y encima en el verano, lo que supuso un cansancio algo mayor, pero contentas de estar juntas y los perros que disfrutarán de estar jugando los dos.

DE GUÍA POR LA CIUDAD


A veces la vida te hace realizar cosas que no pensabas que lo podías llevar a cabo, me refiero a qué cuándo yo estaba en el último curso de la carrera, de Historía, en una asignatura que se llamaba Arte Contemporáneo, teníamos un excelente profesor por lo que era una gozada recibir clase con él, a parte de que sabía mucho,las clases las hacía muy amenas, desde principio de curso nos dijo cómo iba a ser el programa.
Él nos explicaba el temario y nosotros lo dívidíamos entre los alumnos eligiendo así el tema que más nos interesaba, que debía ser en forma de trabajo expuesto en clase cuándo tocase explicarlo delante de la clase. Eramos 8 chicas y tres chicos más el profesor. Era el horario por la noche, y en un departamento de arte, vamos una gozada. La clase y el grupo en particular nos llevábamos muy bien y eso se notaba. Bueno elegí el tema de Arte Aragonés de los siglos XIX-XX, que tocó el último de exponerlo en clase con diapositivas más la explicación correspondiente.
Bueno yo pensé que sería bueno hacer una pequeña excursión para recorrer parte de la ciudad de Zaragoza,dónde se hallaban los monumentos que eran de ese momento y explicar lo que trataba el trabajo que me había tocado. Expuse la idea tanto al profesor como al grupo de compañeros de clase y a todos les gustó mucbo. Además estábamos ya a finales de mayo y hacía buen tiempo para hacer la demostración "in situ" de mi trabajo.
Quedamos una tarde en un parque de la ciudad, el de Cuéllar, más concretamente y empezé a hacer la explicación de lo que se iba viendo, pero el Profesor, como era su tesis doctoral casi no me dejaba hablar. Me parecía que no estaba bien, ya que me lo había preparado bien, ya que quería sacar buena nota, y eso me hizo no poder estudiar otro parcial que teníamos para la semana siguiente que también lo tenía aprobado y eran muchos temas.
Bueno seguíamos con el paseo haciendo algún alto en el camino para tomar algo, pero él continuaba sin dejarme a penas hablar; eso no me gustó mucho, y cuándo me dijo, Inés habla tú explica lo que tienes que decir, le comenté si no me dejas hablar. Bueno al final él me dijo que lo había hecho bien y que tendría en cuenta mi sacrificio y explicación. Al final fué verdad ya que la nota fué muy buena. Aunque en el exámen final que tuvimos él no estuvo y dejó a un compañero de departamente para cuidarnos mientras hacíamos el exámen. Éste nos dijo lo siguiente: " la nota ya está puesta, pero tiene algunas dudas y con este exámen lo solucionará " como así fue.

VACACIONES DE VERANO EN EL PUEBLO

Siempre se recuerda con cariño cuándo se volvía al pueblo natal, en ese caso Illueca, a pasar unos días de vacaciones de verano con la familia. Al vivir en otra ciudad, cercana pero más grande, como era Calatayud, cuándo se acababa el curso y sabíamos que nos tocaba unos días de asueto en nuestro pueblo con la familia y amigos, nos poníamos muy contentos.

Tocaba estar en la calle más tiempo de lo habitual, con los amigos y recorrer el pueblo que no había tanto peligro como en una ciudad mucho más grande. Aunque habia coches y camiones, en aquella època mucha industria del calzado, ahora por desgracia no es así, pero en aquellos momentos había mucho tráfico por el pueblo y los polígonos industriales.
Nuestra vida en esos días se volvía más duradero, ya que al estar en verano los días se aprovechaban de diferentes maneras. Por la mañana en casa, ayudando a las tías, o incluso yendo a comprar con ellas. Se comía pronto, los tíos trabajaban y tenía que cumplir un horario, y nosotros no nos importaban hacerlo igual.
Después de comer un rato de siesta los mayores, y nosotros con los primos siempre hacíamos algo diferente, ver la tele un rato, leer algún libro, o contar las historías que se nos ocurrían, a veces íbamos a la piscina, pero la verdad que con tanto calor apetecía ir un poco más tarde. Con los amigos o íbamos juntos o nos encontrábamos allí con ellos. Otra cosa que nos encantaba era ir con las bicis por el pueblo. Me acuerdo una tarde que nos fuímo con los amigos y las bicis a casa de unos de los amigos, que era una torre con huerta.
El plan era ir en las bicis, pero eramos más chicos y chicas que bicis, entonces algunos de ellos, los dueños de sus bicis nos llevaron allí en muchos viajes, y al llegar todos o jugábamos al palé y se nos iban las horas volando o con las bicis que nos dejaban un rato y nos recorríamos el pueblo, casi siempre por las carreteras que no tenía tanto tráfico y no eran tan peligrosa.
Después tocaba la cena cada uno en su casa, y después aprovechando la frescura de la noche venían a nuestra casa, y cómo esta tenía una terraza nos poníamos a contarnos historías o cualquier otra cosa que se nos ocurriera. Eran siempre unos días muy divertidos es cierto que no se olvidan, a pesar del tiempo que han pasado. Es bueno volver a nuestras raíces de vez en cuando.

UN PASEO BAJO LA NIEBLA


Hay momentos en nuestra vida y sobre todo, si es en nuestra infancia que nunca se olvidan, permanecen en nuestro corazón y de vez en cuando, sale a relucir en nuestro pensamiento. Uno de esos episodios míos ocurrió hace mucho tiempo cuándo vivía con mi familia en Calatayud. Eran los años 70, más concretamente a mediados, el año iba casi terminando, pero aún le quedaba algún mes y días para que acabara.
Cada uno de los miembros de mi familia estaban en su sitio, mi padre trabajando en el Banco, mi madre en casa, con sus faenas, que fue ella la que nos díó la noticia que cambiaría el rumbo de nuestras vidas por unos días y a nivel general del país tambien. Era un jueves por la mañana muy temprano, estábamos desayunando ya que teníamos que ir al colegio, además con exámenes y todo, es decir, con los nervios a flor de piel. No sabíamos que nos ibamos a encontrar al llegar a clase.
Y sin embargo, lo que ocurrió es que teníamos una semana extra de vacaciones sin esperarlo, así que vuelta a casa con la noticia y cargada con los libros, los dejamos en la habitación y bien abrigada busqué a mi amiga Olga y decidimos dar una vuelta por nuestra ciudad, bajo una niebla espesa y con bastante frio pero no nos importaba, teníamos unos días de vacaciones y había que aprovecharlos.
A las dos siempre nos han gustado los perros, y así que nuestra primera parada fue una tienda de amigos que nos habían dicho que tenía una perra dálmata y teníamos que ir a conocerla personalmente. Nos hicimos amigas de ella y fue recíproco ya que a ella también le gustamos; eso se vió cada vez que nos la encontrábamos con los dueños nos saludaba como si fueramos parte de sus amigos.
Seguimos con nuestra ruta de paseo, teníamos que ver a nuestros padres en sus respectivos trabajos para decirles lo que había pasado, bueno la verdad que ya lo sabían pero no tenían ni idea que nos hubieran dado una semana de vacaciones y por supuesto que se alegraron. Nos dijeron " aprovercharlas bien", pero no dejeis los estudios ya que teníais exámenes y estarán a la vuelta de las vacaciones y hay que sacar buenas notas.
No había mucha gente por la calle a esas horas, la verdad que hacía mucho frio, esa niebla que se pegaba a los huesos, pero a nosotras no nos importó, ibamos bien provistas de guantes, abrigos y bufandas. Nos apetecía recorrer nuestra pequeña ciudad en ese día. Al final acábamos en casa de una amiga y vecina, que se hallaba enferma y no habia ido al colegio, le teníamos que contar lo que había pasado y que teníamos vacaciones.
Alguno de mis hermanos estaba estudiando fuera de la ciudad, entre varios padres fueron a buscarles ya que una semana de vacaciones las debían pasar en familia. Hay que decir que cada uno de los vecinos o amigos la disfrutaron de forma variada, que según quién era nos hacía gracia las ocurrencias, cosas de crios que no ven maldad pero que les hace gracia al saber como eran.
Como digo fue un momento clave de nuestras vidas y del país esa noticia que nos afectó a todos y cada uno lo disfrutamos de la mejor manera posible. Daba tiempo para todo: estudiar,jugar con los amigos y estar con la familia. Bien aprovechadas que están ahí en nuestro recuerdo de la infancia.